DIARIO DE UN PEREGRINO
Marzo, día 08, Domingo.
Bien temprano, en una mañana bastante nubosa, salimos del albergue y por las estrechas calles de empinadas cuestas primero y fuertes descensos después, salimos al camino que, con la misma variable y accidentada ortografía, nos llevó a Vilei, Barbadelo, Rente y Mercado también conocida por Baxán, donde alcanzamos una meseta con altibajos pero de poca dificultad.
Atravesamos Peruscallo, Lavandeira, Brea… al salir de este pueblo, nos encontramos con un mojón que indica el km 100 y con el reiterado CASI encima.
A estas aldeas le siguieron Ferreira, muy cerca de Pena y Rozas donde empezamos a bajar a Marcadoiro, Parrocha, Vilacha y cuando nos dimos cuenta, una de aquellas bajadas, nos dejó en la orilla izquierda del Sil y de frente, en la orilla derecha, se veía Portomarín.
A la salida del puente una empinada escalera, con un gran arco como base - después supe que dicho arco era un ojo original del antiguo puente que al igual que el antiguo pueblo, duerme bajo las aguas del embalse de Belesar y que, aquel ojo, como otros elementos del antiguo pueblo, por ejemplo la iglesia, había sido trasladado, piedra a piedra, como recuerdo – salvaba el desnivel que hay hasta la calle principal del nuevo pueblo y que dicho sea de paso, no subimos porque se nos presentó como una muralla. El cansancio nos llevó a subir por la calle - carretera hasta la calle principal y, de allí, al albergue.
Después del aseo salimos para cenar. Lo hicimos en un salón balconado de un restaurante que se asoma al río.
Aquella noche, como la de Sarria, la botella de hierbas aromáticas fue de mano en mano y los chupitos de orujo se acomodaron más y más al paladar pero todo fue menor en cantidad y en consecuencia, la exaltación, en el decir y el hacer, también fue menor.
Aquella noche, como la de Sarria, la botella de hierbas aromáticas fue de mano en mano y los chupitos de orujo se acomodaron más y más al paladar pero todo fue menor en cantidad y en consecuencia, la exaltación, en el decir y el hacer, también fue menor.
CASI llegando a Portomarín. Tras el aseo... reponiendo fuerzas.
Texto extraído del libro Turismo o penitencia
Autor José González Mayoral - Goma -
Obra inscrita en el Registro de la propiedad intelectual.
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