DIARIO DE UN PEREGRINO
Marzo, día 14, Sábado.
El día después.
El día después.
Peregrino es el que por motivos religiosos camina a un lugar sagrado para visitarlo. Los peregrino del Camino de Santiago, al día siguiente de recibir La Compostelana, se disponen a poner en práctica un conjunto de normas establecidas por tradición religiosa y que regulan el ceremonial que le da solemnidad.
Con este objetivo, después del desayuno nos dispusimos para ir a la catedral. Por la Calle Hórreo accedimos a la zona peatonal del casco antiguo. Pasamos por la Plza. de Cervantes, la Calle Acibechería y desembocamos en la Plaza del Obradoiro donde comenzamos el rito que se suele practicar…
Primero. Subir por la emblemática escalera - debajo de ella está la cripta de la vieja Catedral - a la fachada principal, donde tres portadas dan acceso a la Catedral… La del centro, dividida en dos por una columna delgada, parteluz, que como su nombre indica, parte la luz y que es el Pórtico de la Gloria porque en el frontón está representado el Salvador y los apóstoles y, en la curvatura del arco, decorándola, muchas figuras sedentes. Las otras dos portadas son… la de la derecha, llamada el Pórtico del Infierno por representar a éste y la de la izquierda, llamada el Pórtico del Purgatorio por estar éste, allí significado.
Segundo. Poner las manos, que no pudimos pues estaba en restauración - en la columna parteluz de la portada del Pórtico de la Gloria, debajo del Santo, el lugar se nota por el desgaste y simboliza "tocar" el fin del camino. También es conocida como la columna de los deseos, pues al poner la/s mano/s es costumbre pedir tres deseos.
Tercero. El cabezazo, consistente en dar cabezazo/s en el Santo detrás de la columna parteluz. Casi todos opinan que no es el Santo que es el arquitecto, el maestro de obra el que queriendo dejar su huella, allí se ha plasmado. Este/os cabezazo/s deben darse de rodillas y concede/n talento y sabiduría. Nosotros, tampoco pudimos darlo por el mismo motivo.
Cuarto. El abrazo, que consiste en ir hacia el lateral derecho del Altar Mayor, subir al camerino y abrazar o/y besar al Santo. Cuando lo hacía, lo primero que se me vino al pansamiento fue la tarde - noche de Cebreiro y le di las gracias por estar allí… también le di las gracias por permitirme, cada día, levantarme todas las mañanas en mi casa, en mi cama y no en la de un hospital.
Quinto. Visitar la cripta. Al salir del camerino, al lado, otra pequeña puerta da paso a la cripta del Apóstol situada bajo el Altar Mayor, donde también se encuentran los restos de dos de sus discípulos. Al salir comenté a mis hermanas…
Quinto. Visitar la cripta. Al salir del camerino, al lado, otra pequeña puerta da paso a la cripta del Apóstol situada bajo el Altar Mayor, donde también se encuentran los restos de dos de sus discípulos. Al salir comenté a mis hermanas…
- La cripta antigua estaba en el lugar donde el pastor encontró el sepulcro del Santo; donde construyeron... primero un pequeño santuario, luego una iglesia y más tarde una catedral… todo esto queda hoy debajo de la escalera de la Plaza del Obradoiro. Esa escalera la construyeron cuando hicieron la catedral nueva y para poder subir desde la Plaza del Obradoiro a la puerta principal de la catedral recién construida. Hay que tener en cuenta que la catedral vieja, sus restos y la antigua cripta se quedaban delante de la nueva e impedían el acceso a la entrada principal. Con la construcción de la escalera se solucionó el problema de acceso por el Pórtico de la Gloria. Hoy, la visita a esos restos antiguos está restringida. Una losa recuerda el lugar donde el pastor encontró el sepulcro.
Sexto. Asistir a la Misa del Peregrino. Misa que se caracteriza por…
* Su hora, todos los días, a las doce.
* El lugar, siempre, en el Altar Mayor.
* La mención numérica y de procedencia de los peregrinos llegados el día anterior y son acreedores de La Compostelana.
* El uso del Botafumeiro, el gran incensario que es colocado, subido y pendulado (solo en en determinadas "fiestas de Guardar" y el 25 de julio) en el crucero desde la Puerta de la Parroquia que da a la calle Azabachería, hasta la Puerta de Platerías, por ocho tiraboleiros y cuyo objetivo, en la antigüedad, era perfumar el ambiente en la catedral y…
Séptimo. Recibir la bendición especial.
Terminada la misa continuamos el recorrido interior de la catedral... Visitamos las capillas situadas al lado y por detrás del Altar Mayor, la capilla de San Andrés en la girola y… salimos por la Puerta de Platerías donde se representa el Pecado Original, cuando Adán y Eva son expulsados del Paraíso Terrenal y subiendo las escaleras pasamos a la Plaza Quintana, donde indicando a mis hermanas la puerta tapiada, les dije…
- Ese marco, que se nota distinto, es la señal de un tabique que oculta la Puerta Santa. Ahora está tapiada pero, el año que viene, que es compostelano, tiran el tabique y abren la puerta y,,, curiosamente, ese año, los peregrinos entran por aquí… por Platerías.
A la salida comimos y nos fuimos al hotel. Por la noche salimos a cenar y cuando paseábamos por la Calle Franco nos encontramos con un personaje emblemático Do Camiño, Juan Carlos Lema; conocido, en el mundo del Camino, por Zapatones... Prototipo de imagen de peregrino, al más justo estilo medieval que recorre pueblos y ciudades del camino informando al peregrino… del estado de senderos, carriles, cañadas, veredas, carreteras… de las distancias y situación de las aldeas, pueblos y ciudades… de la localización, aperturas o cierres de albergues y, por todo esto, intuí que le habían hecho mecedor del título de … Embajador del Camino, nombrado por el Exclmo. Ayuntamiento. Según sus palabras, a las que acercándose a mi oído añadió… Y con una paga; pero, siempre tengo que ir así. Se refería a su indumentaria de peregrino.
- ¿Nunca se quita la capa…?
- Ni la capa, ni el bastón, ni …
- ¿Ni el sombrero…?
- Nada.
- ¿Ni, cuando asiste a un acto social…?
- ¡Nunca!. Ya lo dije en la TV. Cuando me muera, quiero que me entierren así, como estoy…
Después de intercambiar algunas opiniones sobre el estado de los caminos, los albergues y otros componentes de El Camino, nos despedimos… el continuó por la calle y yo fui a busca a los míos.
Para la cena había transmitido a mi familia mi deseo de ir a “Los sobrinos del padre” por su especialidad en pulpo.
Entramos en dicho bar… pedimos, comimos y bebimos. Estando en ello, el nombre del bar atraía tanto mi interés que decidí preguntar al camarero…
Entramos en dicho bar… pedimos, comimos y bebimos. Estando en ello, el nombre del bar atraía tanto mi interés que decidí preguntar al camarero…
- Eso de… Los sobrinos del padre. Cómo se lee…?
- La lectura, es bien sencilla… si se fija lo descubrirá.
- Ese titulo es, para mí, un laberinto familiar, en el que no encuentro la salida.
Y, era verdad; aquel letrero en la puerta del bar, que había leído en más de una ocasión en mis viajes a Santiago, siempre había atraído mi curiosidad. Curiosidad, que en aquellos momentos estaba dispuesto a confirmar y digo confirmar porque tenía una idea, equivocada sobre tan atractivo nombre. Ahora estaba allí, más que por el pulpo, por confirmar mi sospecha sobre “Los sobrinos del padre”. Así que en cuanto tuve ocasión, con una exigencia soterrada que certificara mi opinión, insistí al camarero…
Y, era verdad; aquel letrero en la puerta del bar, que había leído en más de una ocasión en mis viajes a Santiago, siempre había atraído mi curiosidad. Curiosidad, que en aquellos momentos estaba dispuesto a confirmar y digo confirmar porque tenía una idea, equivocada sobre tan atractivo nombre. Ahora estaba allí, más que por el pulpo, por confirmar mi sospecha sobre “Los sobrinos del padre”. Así que en cuanto tuve ocasión, con una exigencia soterrada que certificara mi opinión, insistí al camarero…
- Los sobrinos del padre… ¿Qué lectura tiene?
El camarero me atestiguó...
El camarero me atestiguó...
- El fundador de esta casa fue nuestro tío, que era cura. Cuando él se hizo mayor, nuestro padre siguió con el negocio y cuando nosotros lo heredamos le pusimos "Los sobrinos del cura" .
- Gracias!.
Después, presuntuoso, me dije...
- ¡Lo que pensaba!.
Después, presuntuoso, me dije...
- ¡Lo que pensaba!.
Cuando salimos de aquel local del que tanto había oído hablar por la fama del pulpo y del que me tanto me atraía su nombre, pensé…
- Lo único que me ha compensado ha sido confirmar mi sospecha. Pero, por qué el cura podría un bar?.
Con la presunta respuesta en mente me dije...
- En la próxima visita, si es que la hay... se lo pregunto.
Con la presunta respuesta en mente me dije...
- En la próxima visita, si es que la hay... se lo pregunto.
Ya en la calle, con los comentarios, sobre lo comido, lo bebido y lo que haríamos el día siguiente… nos fuimos a descansar.
1.- Credencial del peregrino.
2.- El peregrino.
3.- Entrevistando al Embajador de El Camino.
4.- La Compostelana.
EN LA CATEDRAL DE SANTIAGO DE COMPOSTELA
Texto
extraído
del libro Turismo o penitencia
Autor
José
González Mayoral - Goma -
Obra
inscrita en el Registro de la propiedad intelectual.
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